inborinth's reviews
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Vampira es una historia que recopila momentos de soledad, dudas, sexualidad y temor. Atraviesa aquellos tramos mediante la vida de una mujer atrapada en un cuerpo sediento de contacto, refugio y melancolía. 

Con una trama tan variada y libre, es difícil abrumar al lector. Tiene un tinte creativo y solitario, que se refleja perfectamente con el correr de los años del personaje y su tiempo como una vampira. La prosa tiene detalles personales; familiar y oscura; que te permite absorber con facilidad los momentos relatados. Fluye orgánicamente hasta que nos enfrentamos con los agradecimientos.

Vampira definitivamente tiene su punto cúlmine y te deja sediento de historia. Con un final abierto a descubrimientos, permite que el lector tenga una perspectiva fresca hacia el futuro de la protagonista. 

🩸 ¡Muchas gracias a la autora, Julieta Manterola, por el ejemplar y por confiar para una reseña de su obra. Definitivamente continuaré leyendo más de sus trabajos.

 ❝𝐈𝐟 𝐰𝐞 𝐦𝐮𝐬𝐭 𝐝𝐫𝐨𝐰𝐧, 𝐥𝐞𝐭 𝐮𝐬 𝐝𝐨 𝐬𝐨 𝐞𝐧𝐭𝐰𝐢𝐧𝐞𝐝.❞

La calma se rompe con brusquedad ante el grito de auxilio, desapariciones que alteran la paz entre pueblos se torna palabra en el viento y los espíritus que custodian los elementos conocen la verdad que fluye entre las tierras humanas. Con un simple canto, una entonación lírica de poder, podrán hallar aquello que desean con toda el alma. Sin embargo, cada cántico mágico tiene sus límites y consecuencias. La música quiebra la mentira, pero también la vida. Se aferra a los años duraderos, al alma más pura, para sobrevivir en el viento, la tierra, el agua y el fuego. Son encantamientos creados para respetar a los espíritus, baladas que fluyen como el agua de los ríos que guían eternamente hacia la verdad. Es una conexión que perdura.

A River Enchanted tiene ese tinte fresco en la trama que me fascinó encontrar. Es una historia ambiciosa y original, con la belleza que abarca la prosa de la autora hasta el folklore que se entrelaza perfectamente con el destino de los personajes. La narración se toma su tiempo, dejando entrever esos minúsculos detalles que harán que el lector se aferre a los conocimientos de la trama. La historia fluye como la música de su interior, y se siente como bailar en la brisa encantada de la isla de Cadence. Rebecca Ross logró tejer magia en la trama, como sus personajes. Tejió algo fuerte y duradero que será difícil de olvidar. 

Lo que más destaco de esta historia es el peso que tiene la música. Como mencioné antes, la música tiene el poder de quebrar y remediar, de quitar y dar. Es algo que logró cautivarme desde el comienzo porque, como amante de la música, era fácil imaginar la entonación y el ritmo que los personajes le daban a las canciones. Como lectora, me sentí abrumada por su belleza e inmersa en el significado. 

 ❝𝐈 𝐚𝐦 𝐭𝐡𝐞 𝐬𝐥𝐚𝐲𝐞𝐫.❞

Cuando la oscuridad te mantiene vivo y los recuerdos desaparecen, la sangre y las verdades ocultas es lo único que puede liberarte. Una criatura que yace en las profundidades del bosque, atrapada en la miseria del olvido, perturbada por su ausencia en el mundo, se halla hambrienta por el conocimiento. Hambre de poder. Y, aunque es la muerte lo que le permite la solidez de una vida, lo que le da cuerpo y propósito, comienza a enfrentar sentidos que creía perdidos. Como si su alma volviera a formarse, un espíritu libre que necesita volver a ser quien era. 

La crudeza de este libro es sólida, palpable y hasta tajante de leer. No consideré la crueldad que yace en ella, la hipocresía y la ignorancia que acechan al más mínimo respiro de libertad, de realidad. Creí que iba a ser una historia más de brujas y bosques, pero no es solo eso. Paganos contra puritanos; un enfrentamiento que me frustró presenciar. La impotencia que le genera al lector es demencial, porque se torna personal. Eran esos momentos de fanatismo los que envenenaban la pureza de la historia de Abitha, la belleza que se hallaba en su persona. Y, al conectar con los personajes, incluso con un demonio solitario, se siente como si fuera un ataque íntimo hacia el lector. Tiene una prosa tan vívida que es difícil separarse de la trama. 

Brom convierte una historia de pérdida y crueldad en algo por lo que obsesionarse. Una trama que acompaña dos increíbles personajes como lo son Abitha y Samson en la lucha por su destino, la lucha por quemar las mentiras y la hipocresía de las creencias humanas, la lucha por la magia y el poder de la tierra y sus tantas criaturas. Todo aquello converge en un final emocional y esperanzador. Debo decir que esta historia se convirtió en una de mis favoritas desde el principio y, aunque la trama es bastante severa y realista, es clave admitir que es una obra maestra. 

🐐 (5) ★★★★★
𝗧𝗪: 𝘧𝘢𝘯𝘢𝘵𝘪𝘴𝘮𝘰 𝘳𝘦𝘭𝘪𝘨𝘪𝘰𝘴𝘰, 𝘮𝘪𝘴𝘰𝘨𝘪𝘯𝘪𝘢, 𝘤𝘳𝘶𝘦𝘭𝘥𝘢𝘥 𝘢𝘯𝘪𝘮𝘢𝘭, 𝘣𝘰𝘥𝘺 𝘩𝘰𝘳𝘳𝘰𝘳, 𝘨𝘰𝘳𝘦, 𝘢𝘣𝘶𝘴𝘰, 𝘵𝘰𝘳𝘵𝘶𝘳𝘢, 𝘪𝘯𝘴𝘦𝘤𝘵𝘰𝘴... 

 ❝𝐈'𝐦 𝐬𝐩𝐥𝐢𝐧𝐭𝐞𝐫𝐞𝐝 𝐩𝐢𝐞𝐜𝐞𝐬 𝐡𝐞𝐥𝐝 𝐭𝐨𝐠𝐞𝐭𝐡𝐞𝐫 𝐛𝐲 𝐟𝐫𝐚𝐠𝐢𝐥𝐞 𝐡𝐨𝐩𝐞.❞

Algo crece en esta historia; un secreto, una vida; un propósito divino. Se aferra entre lo más profundo del bosque Morguewood, un lugar donde se ocultan huesos y muerte, soledad y hambre. Respira y se alimenta de la hipocresía humana, del dolor que unos imparten sobre otros, de todo aquello que penetra en lo más profundo de tu mente, del miedo y los recuerdos. Y cada vez es más fuerte, devorando la cordura de los que se atreven a desafiarlo. 

Together We Rot toma el lado más temeroso de la metamorfosis y lo transforma en algo bellísimo de presenciar. Y es esa parte cubierta de miedo lo que más captó mi atención durante la trama, porque era un miedo que envolvía a los personajes, más específicamente a Elwood, como un capullo, uno que no dejaba entrar la luz. Se sentía cómo si estuviera haciendo el efecto contrario del capullo, no crecía para liberarse, sino para atraparte de por vida. Así es como Elwood vivió toda su vida. Aferrado a las palabras de sus padres, a las costumbres y creencias basadas en muerte y sacrificios; en huesos y palabras sin sentido. La hipocresía misma era lo que los mantenía en el poder. Solo que, a veces, años de control pueden quebrarse en una sola noche. 

Este libro tiene sus momentos retorcidos como las raíces de un árbol, pero a medida que la trama avanza y las palabras se tejen de una manera atmosférica y original, se puede ver el crecimiento de los personajes orgánicamente. Hay un equilibrio entre ellos, como una especie de espejo que reflejan sus diferencias. Son opuestos, pero con un mismo objetivo: la verdad, la libertad. Dos naturalezas que se entrelazan para formar algo catastrófico y bello de leer. Wil y Elwood eran parte de una tormenta, ellos la creaban: la ira y la calma. 

Es una historia con un mensaje inspirador y el final de la trama es aún más emotivo. Convergen todos los miedos y el dolor sobre la tierra de aquel bosque, sobre el mismo Elwood, y se transforma en luz y vida. 

 ❝𝐖𝐡𝐲 𝐝𝐢𝐝 𝐲𝐨𝐮 𝐭𝐚𝐤𝐞 𝐭𝐡𝐞 𝐰𝐨𝐮𝐧𝐝𝐬 𝐭𝐡𝐚𝐭 𝐬𝐡𝐨𝐮𝐥𝐝 𝐡𝐚𝐯𝐞 𝐛𝐞𝐞𝐧 𝐦𝐢𝐧𝐞?❞

Con el correr de los días, Divine Rivals se volvió una historia sumamente especial para mí. Supongo que no debo ser la única, pero fue mi primer encuentro con la autora y ahora entiendo esa incomparable felicidad que trae leerla.   

Es una historia que roza la crudeza de una guerra, la pérdida y el dolor; el duelo y la esperanza, pero también la belleza y el peso de las palabras en momentos de soledad. Este libro comparte un sentimiento tan puro y humano: la pasión por la escritura. Es un hecho que se destaca en cada capítulo, le da luz a esos rincones oscuros que envuelven a los personajes. Las palabras los unen, la rareza de un secreto los acerca aún más y el destino finalmente los atrapa en un lugar que da comienzo a una nueva vida. A pesar del caos, de la muerte, de heridas internas que aún intentan sanar, hay una delicada línea que se va formando hacia el final que permite al lector enfrentarse a la tormenta de emociones que surgen como una ola gigante. En experiencia propia, haber leído este libro provocó una sensación de compañía que hace mucho no encontraba en una historia. Incluso conviviendo con la soledad que se aferra a los personajes, la incertidumbre y la supervivencia, hay un tinte de belleza que es imposible ignorar. 

Lo que más aprecié de Divine Rivals fueron las cartas. Eran momentos para sentir y tener las emociones en carne viva. Porque así fue como lo viví, a través de una prosa increíble y una construcción narrativa que me cautivó desde el comienzo. Estoy 100% segura de que voy a seguir leyendo a Rebecca Ross. 

 ❝𝐐𝐮𝐞𝐫𝐢́𝐚𝐦𝐨𝐬 𝐬𝐞𝐫 𝐥𝐢𝐯𝐢𝐚𝐧𝐚𝐬 𝐲 𝐩𝐚́𝐥𝐢𝐝𝐚𝐬 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐜𝐡𝐢𝐜𝐚𝐬 𝐦𝐮𝐞𝐫𝐭𝐚𝐬.❞

 No es extraño que al leer a Mariana Enriquez la realidad se torne inexistente. En cuanto comienzan sus relatos, es como si el lector estuviera tan inmerso en las palabras crudas y oscuras, que hace que el mundo se cubra por un manto de trivialidad. Pierde el significado al adentrarte en estos cuentos porque te absorben hasta la médula. Entretienen la mente hasta volverla un caos emocional, aterrorizan los huesos y perturban hasta lo más cotidiano, convirtiéndolo en una pesadilla viviente. 

Con la brusquedad que se entrelaza en la narración, el lector va descubriendo que algo humano puede mudar de piel y dejar lo más terrorífico, absurdo, malévolo e inquietante del mismo. Se altera en sucesos cortos, como un corte fresco en la cara o el arranque de las pestañas o el fuego en la piel que devora sin detenerse. Estos relatos enredan al lector en una tela de araña de violencia y celos, supersticiones y ritos. Es fascinante ver cómo, en tan pocas páginas, Mariana Enriquez cobra vida los miedos más simples, dejándolos crecer hasta que solo queda el dolor y la toxicidad del terror profundo que se cuela en el cuerpo. 

Con gran sinceridad, en este libro en particular, sentí que los personajes se conectaban de una forma muy similar. No logré ver diferenciación en algunos, incluso siento relatos distintos. A veces hasta se tornaba repetitivo el concepto del desamor, la irritabilidad y otros aspectos. Aún así, la lectura se disfruta y se lee con un nudo en la garganta en todo momento.

(4) ★★★★☆

‼️TW: abuso infantil, body horror, lesión por incendio, drogas, adicciones, desorden alimenticio, suicidio, abuso emocional, abuso sexual, relaciones tóxicas, esquizofrenia, psicosis, intolerancia religiosa...