5 estrellas

La mayoría de los libros de fantasía siguen un esquema básico: niño/a elegido por una profecía milenaria busca aliados para matar a un lord oscuro. Lo matan. ¿Y ahora qué?

Pues ahora tenemos este libro, que inicia con Arek, nuestro protagonista, cortándole la cabeza al malo, un mago oscuro que usurpó el poder y lleva años reinando. Y que es calvo. Parece una tontería, pero es importante.

Sobre todo cuando Arek le quita la corona, alentado por su amigo Matt, y se autocorona de risas. Iniciando así una carrera contrarreloj de tres meses para casarse, o desvanecerse.

Como Arek y Matt tiene dieciocho años, un crush oculto en el uno y el otro, y muy poca vergüenza, deciden hacer lo que toda persona responsable haría: restaurar el país, buscar aliados y ligar con tus mejores amigos para no morir.

¿Qué voy a deciros? Es un libro genial, con una prosa al más puro estilo de Terry Pratchett, riéndose de los clichés de la fantasía, retorciéndola hasta crear una comedia romántica-fantástica de enredos.

Tenemos una familia encontrada entre un grupo de personas que podrían ser un grupo de artes: una mercenaria que quería ser artista, un noble que pelea regulín, una barda jigglypuff, un mago que amenaza con convertir en sapos a todos, una ladrona/cleptómana feérica y un elegido que no sabe ni por dónde empezar.

Y tiene representación de prácticamente todas las letras, aunque la pareja principal sean dos chicos; y una buena traducción, ya que se usa el lenguaje inclusivo con un personaje no binario.