la inteligencia artificial está en boca de todos. no sé si se puede decir algo en este momento que no se haya dicho cien veces antes, que no se dirá cien veces mañana. algunxs le tienen miedo, otrxs creen que es el invento del siglo. pero la pregunta que nos atraviesa tanto a mí como a esta novela es - ¿cómo se mide lo humano? ¿cómo se mide quién es o no humano? si leemos klara y el sol, si nos compenetramos en la historia, vamos a pensar que klara (una amiga artificial) es una persona más. que klara tiene sentimientos, corazón, alma, vida. que klara piensa y siente como yo, como vos, como cualquiera. ¿qué la diferencia de mí? ¿qué la diferencia de vos? ¿que es puros circuitos? ¿que aprendió sus sentimientos en vez de adquirirlos? ¿y nosotrxs? ¿aprendemos a sentir o nacemos sintiendo? kazuo ishiguro se cuestiona la idea del corazón humano, de si es algo que puede crearse, moldearse, si es una habitación con muchas puertas imposible de desbloquear, de entender, de atravesar; si una máquina puede replicar un corazón humano y acompañarnos cuando esa persona ya no esté. la pregunta que atraviesa toda la novela es - ¿qué nos hace humanos? ¿qué no nos hace humanos? pero, sobre todo, ¿qué nos hace a los seres dignos o no de ser amados?