Esta tercera entrega del libro de los sueños me resultó tan entretenida como las demás. Aquí descubrimos la identidad de Secrecy y concluye la historia principal que inició en el primer libro.

En total a la trilogía le doy una puntuación de 3/5, siendo el primer libro mi favorito, pero todos fueron entretenidos, ligeros y con toques de humor. Estoy satisfecha con la conclusión que nos brinda este.

Me gustaron los personajes, el mundo de los sueños y la voz de la protagonista Liv. Me agrada que en ninguno de los libros el enfoque sea el romance y que se trate más sobre la amistad y la familia. Mi única crítica es que nunca se explicó bien cómo funciona el mundo de los sueños y por qué los protagonistas pueden hacer en él lo que hacen. Me gustaría conocer más sobre eso, el origen, el por qué y cómo de ese mundo.

Siento que al igual que la otra trilogía de la autora, Rubi o piedras preciosas, Gier no se toma la historia muy en serio (lo que valoro mucho), sabe lo que está escribiendo, algo ligero, divertido y entretenido que no pretende descubrir por qué la gallina cruzó la calle ni ser la obra más profunda del planeta. No tiene la típica angustia existencial del clásico adolescente de literatura juvenil, ni diálogos pretenciosos con Pseudo filosofía a la John Green (¡hey, no hay nada de malo en que te guste JG!). Es un libro para pasar el rato, entretenerte y pasarla bien. Definitivamente leería más de Kerstin Gier.

Recomendado.