¡Qué lectura tan dolorosa! Sin embargo, su fuerza y su simbolismo son como el fuego que devora a su paso lo que encuentre. En esta sociedad distópica el cambio climático ha arrasado con la vida. Los pocos sobrevivientes lo hacen en medio de las peores situaciones: hambre, sed, paisajes desolados, desesperación... Nuestra narradora, una chica que ha olvidado quién es y de dónde viene, se encuentra bajo el poder de la Casa de la Hermandad Sagrada. Desde el inicio, vemos la atrocidad de esta secta donde, "extrañamente", solo hay mujeres. La rigen la Hermana Superior (un juego esto de no ponerla en femenino) y su hermano-Dios: Él. Ahí las mujeres viven el peor de los suplicios bajo el mando extremo de estos dos seres. No hay niños, no hay viejos, no hay hombres. A las mujeres las han enseñado a odiarse, a competir entre ellas, a verse como enemigas. Las someten a las peores torturas y bajo el terror mantienen el control de cada una. Un día aparece una chica pidiendo ayuda. Todo cambia con ella, especialmente el corazón de nuestra narradora. El sistema que habían instaurado finalmente es expuesto cuando una sola de ellas muestra compasión, amor y sororidad por otras.
Bazterrica, a través de un lenguaje bello y poético, nos describe los peores horrores perpetrados por esta pequeña sociedad que no es más que un reflejo de la nuestra. Ahí las mujeres, bajo el férreo control de otra mujer, quien es la encargada de reproducir el discurso misógino y de proteger al dios, como sucede en la realidad, deben odiarse para obtener las migajas que el dios desee darles. Ante cualquier pequeño error, el castigo es brutal.
Es de esas novelas que te calan y te marcan para siempre. No porque tenga un final inesperado, por el contrario, es totalmente predecible, sino por lo que dice en tan pocas páginas. No es extraño, entonces, que haya tardado tanto tiempo para estar lista y poder terminarlo.
Cierro mi reflexión con una de las citas más hermosas del texto: "Ella me hizo sentir cosas olvidadas, como la piedad. Ya no es una dinamita silenciosa, es otra cosa, es como un corazón nuevo, latiendo en el viejo."