2.5/5

Un mundo feliz junto con 1984 y Fahrenheit 451, se consideran los mayores representantes de la literatura distópica. Habiendo leído las tres obras, ésta es la que menos me gusta porque, si bien sí tiene elementos que podemos ver hoy día, el futuro que plantea no me pareció tan aterrador ni tan actual como el de las otras dos, especialmente 1984 (que es mi favorita entre las tres).

Huxley plantea una sociedad utópica donde las personas son creadas en un laboratorio, modificadas y condicionadas para pertenecer a una casta o clase social. Son condicionados tipo los experimentos de Pavlov para realizar tareas especificas y tener gustos y "necesidades" específicos, pre-calculados. Así la sociedad está compuesta por humanos "perfectos", los Alfas y van bajando en "calidad" hacia los betas, deltas, gammas y epsilons.

En este mundo la gente está condicionada para disfrutar el trabajo que le toca hacer (según su casta), son pasivos, consumistas y egocéntricos. Viven en la cotidianidad, donde todo es trivial. La gente es controlada con el placer, a través de una droga alucinógena antidepresiva, llamada soma. En esta sociedad solo importa el placer y disfrute.

Vemos como este mundo sin lucha, ni sueños, libros, religiones, enfermedades, familias... afecta a un extranjero, un ser que fue criado en una reserva y que es nuevo en la misma, un "salvaje" ante los ojos de la sociedad "civilizada".

Encontré relevancia con nuestra sociedad en lo referente a las modificaciones genéticas (para crear al humano "perfecto"), consumismo excesivo, el que el entretenimiento sea más importante que todo (vivimos como zombies viendo videos de gatos en youtube, etc.) y el escapismo extremo.

Me aburrió por momentos, los personajes no me interesaban, pero sí me pareció interesante su vision del futuro.

Lo recomiendo solo si te gustan los clásicos y/o las distopias.