Una historia atrapante con un desarrollo sorprendente

En un mundo donde los seres mágicos mataron a todas las mujeres del reino por venganza, Ziara crece protegida junto a todas las niñas nacidas después de la guerra. Criadas como futuras esposas, su destino se decide a través de un sueño en el que se les asigna un hombre para desposar.

Este libro me sorprendió gratamente. La premisa me atrapó de inmediato, y una vez empecé a leer no pude parar. Es comun que pueda predecir lo que pasara en el libro cuando llevo un 20% leido, pero con este libro no fue así. No porque sea radicalmente diferente, sino porque había tantas rutas y posibilidades que solo me quedó esperar y ver a donde me llevaba la autora.

Ziara siempre sintió que no encajaba, que había algo en ella, algo que no le habían contado. Cuando su hombre asignado llega a buscarla, comienza su viaje de autodescubrimiento y se enfrenta a una realidad que jamás imaginó: un mundo lleno de dolor e injusticia más allá de los muros que la protegían.

"Un título no exime de culpa"

Fue muy gratificante verla crecer dentro de su propia piel, desafiar lo que se suponía era su deber, construir su propia moral y actuar conforme a sus convicciones. Siempre es hermoso ver a una mujer adueñarse de sí misma.
"Una vida, la que sea, ya vale más que un reino"

El romance es un slow burn, con su propio encanto, aunque ralentizó la historia por unos seis capítulos. Por un momento pensé que tendríamos un triángulo amoroso (que no me habría molestado para nada), pero el plot twist del final también funcionó de maravilla. Ahora solo quiero saber qué rumbo tomará el segundo libro, conocer más a fondo el sistema de magia y ver qué decisiones tomará Ziara.

No le di cinco estrellas porque tuve algunos problemas con la escritura. Puede que sea algo personal, ya que casi no leo libros en español y, cuando lo hago, suelen ser clásicos con excelente narracion y una edición impecable. Tal vez solo necesito ajustar mis expectativas, pero definitivamente fue una muy buena lectura.