Este libro comienza siendo una especie de retelling de El príncipe y el mendigo, sin embargo, se va convirtiendo en algo más conforme avanza su lectura.

Es el primer libro de Cassandra Claire que va dirigido a un público adulto. La verdad, me ha gustado mucho. Es entretenido, se nota el trabajo detrás de este por parte de la autora. Por ello, a pesar de tener 624 páginas, es una lectura fluida. Me ha encantado que se decidiera por un narrador omnisciente porque, en muchos sentidos, soy bastante tradicional en esto cuando a libros de Fantasía se trata.

Kel Saren creció en un orfanato. A los 10 años se convierte en el guardián de espadas del príncipe Conor. Ambos tienen un parecido tremendo que se hace más fuerte con el uso de un talismán del tiempo antiguo.

A lo largo de la historia se va construyendo el mundo de Castellana, los conflictos entre las diferentes casas reales, la fractura creada por la ambición de los hechiceros reyes y el descubrimiento de un nuevo poder. Todo ello se mezcla con el sinsabor de Kel sobre su propia vida. ¡Ni siquiera tiene su propia habitación!

Claramente, es el libro inicial de la serie, que espero no se haga una eternidad como con The Shadow Hunters.

Me parece una buena lectura, mil veces mejor que The Fourth Wings, por ejemplo y esperaré a la segunda parte para leerla.